jueves, 2 de septiembre de 2010

Anverso y Reverso




Esta carta de naipe que presento acá, va a ser de aquí en adelante la forma en que yo concibo la forma de acceder al arte de la colección.
Todos en menor o mayor medida, somos coleccionistas de algo a lo que... (no sé), quizá inconscientemente, quisiéramos llegar a incorporar a nuestro propio ser.
De esa cosa de la que nos estamos apropiando, que puede ser de gran valor económico o no), tiene la particularidad de atraparnos en su mundo, si es que lo tiene, o por lo menos en sus propias características de su propia condición de su ser.
Entonces, ahí estaríamos subyugándonos unos a otros.
Nosotros personas; con nuestras "divinas" -de divinidad-, cosas que nos hacen enorgullecer porque nos pertenezca.


En síntesis, para explicar un poco de lo que estoy mostrando, es el resultado, todavía no completo de mi propia colección.

Alguna vez que no sé determinar con exactitud el tiempo preciso; escuchando en la radio al Señor Alejandro Dolina. En sus relatos históricos a modo de premisa valorativa o de simple anecdotario de lo que le sucedió a la historia del hombre mismo, escuché la excéntrica forma de un tal personaje (que tampoco puedo recordar de quién se trata), empezó a escabullirse en la busqueda de poder completar su ponderada colección de naipes.
Pero no fueron para ese personaje unos naipes cualquiera los que debía tener para sí, sino que la inventiva que se había creado, era la de poder obtener cada uno de sus estampas, generadas quizás por el azar.

Sí, ese azar que a veces parece serlo y otras veces pareciera que no existe tal azar.

Cada estampa de naipe (para seguir con el relato), tiene la condición ineludible, de ser ENCONTRADA en la vía pública, sin ser otra persona la que la encontrara y sin que esta carta se repitiera en alguna oportunidad.

Paso en limpio: Cada carta de naipe debe ser encontrada en la vía pública, no debe ser obsequiada por otra persona que queriéndonos hacer un favor nos regala su naipe encontrado y por último, no debe repetirse en ningún hasta tratar de terminar la colección completa de todo un mazo de juego de naipes.

Pues entonces, desde ese mismo relato me lancé yo mismo a imitar tal gesto de ese hombre que no recuerdo y que tampoco recuerdo cómo le fue en su empresa de colección.

Aquí entonces, mi propia colección de mis naipes que ya encontré, y que voy a ir desplegando en este, mi espacio, para seguir mostrando un poco de lo que vine construyendo desde ya varios años, aunque ya muchas voces digan que esta empresa enfermiza, no sirva para nada.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Una mujer desnuda y en lo oscuro 
Mario benedetti

Una mujer desnuda y en lo oscuro
tiene una claridad que nos alumbra
de modo que si ocurre un desconsuelo
un apagon o una noche sin luna
es conveniente y hasta imprescindible
tener a mano una mujer desnuda.
 
Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera un resplendor que da confianza
entonces dominguea el almanaque
vibran en su rincon las telaranas
y los ojos felices y felinos
miran y de mirar nunca se cansan.
Una mujer desnuda y en lo oscuro
es una vocacion para las manos
para los labios es casi un destino
y para el corazon un despilfarro
una mujer desnuda es un enigma
y siempre es una fiesta descifrarlo.
 
Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera una luz propia y nos enciende
el cielo raso se convierte en cielo
y es una gloria no se inocente
una mujer querida o vislumbrada
desbarata por una vez la muerte.

martes, 31 de agosto de 2010

Firma de mano


Para seguir con mi presentación se me ocurrió estampar mi propia mano a modo de firma, así como lo hacíamos cada uno de nosotros cuando éramos niñitos.
Como cuando jugábamos a ser alguien importante dando nuestro mensaje de "Presente", en la esferas de nuestros mundos a la que estábamos inmersos en esos instantes.
La firma de mano es la cosa más primordial, más espontánea y primitiva forma de hacer que nuestras potestades ante los demás, se plasmen en una simple hoja.
Es la cosa más simple, pero a la vez tan importante como nuestras firmas actuales.
Era un juego. Era eso simplemente, pero no tan simple.
Era el juego, el encuentro con nuestros amigos o el modo más sutil de dibujar en colores parte de nuestro propio ser.
Este es mi "presente" más presente; un poco volviendo a jugar a ser un chiquiín, pero también dando cuenta que soy yo mismo el que tiene esos anhelos de un chiqulín y dar mi versión más real de plasmar mi propio ser.

lunes, 30 de agosto de 2010

Presentación e Inauguración

Bueno, que se puede decir en esta noche de inauguración de mi espacio sideral en los enjambres de la Red que todo lo puede, todo lo ve y todo lo sabe.

Que se pude decir que no se haya afirmado con anterioridad. Algo inteligible o inteligente en las sombras de mi misma actividad psico-dramática y psico-virtual, en esta forma de hacer Arte.

Nada, simplemente nada.

Entonces los invito a disfrutar o sufrir conmigo esta pequeña y empobrecida canción alegórica de lo que alguna vez sea pasee por mi mente.